Etapa 1 (continuación)

%image_alt%Después de salir del taller, con mi dirección completamente restaurada empezamos de nuevo a pedalear. Poco después, cuando salimos del inmenso recinto de la Expo 98 ya nos entró hambre y paramos a comer. Total, que hasta las tres de la tarde%image_alt% no empezamos en serio a pedalear… y todavía nos quedaban 50 kilómetros por delante. El resto no tiene mucha más historia, porque las afueras de Lisboa, al menos por los caminos que estábamos transitando eran bastante feos y desapacibles. Fincas desangeladas, campos destartalados y caminos rotos e incómodos. Y para postre pinchazo de Paco, que al agradable calorcillo de 35 grados fue una auténtica delicia para los sentidos. Como íbamos con mucho retraso apretamos bien el final para poder cuplir con la ruta prevista y llegar a %image_alt%Azambuja. Con tanta suerte… o mala suerte, que el pueblo estaba en fiestas, celebrando la Feria de Maio, y justo esta noche acababa. %image_alt%Todo el pueblo cortado con barreras para los toros y los mozos toreando. Así que el tema alojamiento se complicó bastante, los bombeiros voluntarios, que son aquí los que hacen las veces de hospitaleros, no estaban precisamente para atendernos a nosotros, la pensión llena hasta arriba, así que nos tuvimos que sacrificar e ir a dormir… a un hotelito con aire acondicionado. Pero después de todo no nos podemos quejar, al fin y al cabo esto lo hacemos por gusto. 😀

Un comentario

  1. Bueno chicos, no os falta de nada, hasta os reciben con una novillada, no quejarse, un beso

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