Día 3. Benifallet – Alcañiz

El esfuerzo de ayer por aquel sendero del bosque de escalones, piedras gigantescas y subidas y bajadas imposibles lo vamos a pagar hoy. Yo he tenido todo el día el tendón de aquiles del pié izquierdo muy dolorido, de alguna mala postura de ayer, y menos mal que la etapa de hoy no es excesivamente exigente.

A las nueve estábamos ya pedaleando, después de tomar un café en el propio pueblo antes de salir. Hoy tenemos que buscar provisiones porque hasta Alcañiz, los únicos pueblos que hay, están demasiado alejados de la Vía Verde. Aún así, sobre las 10:30 en Bot paramos a tomar un bocadillo y a compr

ar alguna cosa para el camino.

Una vía verde está bien durante un rato, pero durante 90 kilómetros se hace un poco pesada. Aún así, la zona es muy bonita y merece la pena verla. Tenemos que salvar un desnivel de 600 metros por la vía verde, que a razón de un 1%, se convierte en estar todo el día pedaleando sin parar ni un momento. No hay descansos, no hay bajadas para recuperar. Llegados a los 600 metros, se baja de golpe hasta 450 y otra vez a subir hasta 560… No hay mucho más que contar.

A las cuatro de la tarde ya estábamos en Alcañiz, y como era pronto y estábamos bien, decidimos volver a casa directamente, sin quedarnos allí esa noche tambien.

En resumen, después de la experiencia, la ruta muy recomendable, aunque habría que tener en cuenta varias cosas. Yo la plantearía ahora en cuatro etapas, comenzando desde Caspe, para hacerla con más tranquilidad. 90 kilómetros diarios es mucha tela, sobre todo los dos primeros días, que hay complicaciones. Para quién no le guste bajar (que los hay), buscar una alternativa entre Almatret y Riba-roja, por pista o carretera. Y desde luego evitar sin duda el tramo entre Miravet y Benifallet por el GR y hacerlo por carretera.

Resumen de la ruta

Hasta pronto.