Desayunamos en la misma Fonda Nueva Allandesa donde hemos dormido hoy. Tenemos que salir bien desayunados porque tenemos una buena paliza antes de llegar al próximo pueblo.
En la salida del pueblo, sobre las 8 de la mañana pasamos a los cuatro ciclistas andaluces que llevamos viendo desde hace un par de días y que también están haciendo el Camino. Ellos vienen sin alforjas y llevan contratado un Pack de taxis que les llevan el equipaje de un sitio a otro. Una buena forma de hacer el camino si no quieres cargar con peso.
En seguida empezamos a subir el Puerto del Palo, de 1150 metros de altitud. La mañana es fresca aunque la chaqueta enseguida sobra. Algunos ni se la han puesto.
Empezamos la subida los ocho ciclistas juntos y en las primeras rampas Enrique (el granadino) y el malagueño (discúlpame que no me quedé con tu nombre) y yo mismo pusimos la marcha fuerte y tiramos hacia arriba sin mirar hacia atrás.
Nos pegamos una buena subida a tren. Creo que Enrique iba a medio gas, todo hay que decirlo, y yo les seguía el ritmo a veces a duras penas. Tras un pequeño alto en la Fonte das Muyeres para beber su fresca agua coronamos el alto con poco más de una hora desde que salimos de Pola.
Unos 20 minutos después empezó a llegar el resto con cuenta gotas. Arriba como siempre hace muchísimo viento y frío y tuvimos que esperar tras el pequeño refugio de montaña que hay en la cima.
La bajada larguísima y rápida, con curvas cerradas y en algunos tramos el camino oficial cruzaba de un lado a otro de las curvas. En los que ví más apetecibles me metí, aunque en ocasiones era bastante complicado ciclar por que había mucha piedra suelta.
Tras la bajada paramos en Berducedo a tomar un bocadillo que sería ya nuestra comida porque nuestra etapa hoy es corta y no queremos que nos pase lo de ayer. Comida suave y cena fuerte.
Vuelta a las bicis y bajada interminable de unos 20 kilómetros hasta el embalse de Grandas de Salime con unos paisajes espectaculares que hicimos prácticamente del tirón. Tras una parada en el mirador de la presa subimos el escaso kilómetro que separaba la presa del Hotel Las Grandas donde nos alojamos hoy.
En este hotel en 2007 estuvimos Paco, Isabel, Carol y yo sentados en la escalera como exploradores sedientos en el desierto porque pensábamos que estaría abierto y para nuestro disgusto estaba cerrado y medio abandonado. Estábamos sedientos y acalorados y aún nos quedaba subir todo el puerto hasta Grandas de Salime sin una sóla fuente. Ese mismo año también pasaron por aquí José María con sus hermanos y sufrieron el mismo calvario.
En 2013, en el Camino Circular sí que dormimos aquí.
Hemos llegado apenas a las 12:30 de la mañana, con nos 40 kilómetros hechos, así que hoy tenemos todo el día para descansar y relajarnos con estas vistas impresionantes.
Vale, dacuerdo. Etapa de la señorita Pepis. No os acostumbreis…
Va por los tutes que os pegais otros dias, un abrazo a Paco y me alegra saber que su madre esta mejor, un beso mi campeon
Preciosos paisajes…
Lo del pack de taxis para llevar el equipaje de un sitio a otro me ha dejado turuleto, pero estupendo.Repetis rutas sois unos profesionales.Animo y por mas .Besos