Hoy salimos los últimos del albergue, tras zamparnos lo que quedaba del tocinito de ayer.
Antes de salir del pueblo tomamos un café y sobre las nueve estábamos pedaleando.
Seguimos como ayer por la N-635, con mucho tráfico y muchos camiones.
Al salir de Cornellana tomamos una pista con mucho desnivel. Yo tiro para arriba sin pararme y cuando llego arriba me llama Paco para decirme que toma la carretera. Imposible subir con el tamdem. Yo continúo por el bosque. Un precioso camino, aunque muy duro y empinado.
En Salas nos reagrupamos, tomamos algo y seguimos José María nos avisó que entre Salas y Tineo había un camino muy bonito que merecía la pena que yo hiciese. Aunque no el tandem ni Carol. Aún así, creyendo que era más adelante, comienzo el tramo de carretera junto al grupo hasta el primer cruce, donde ahora sí cojo el camino.
Creo que la parte bonita la he dejado atrás, y estoy haciendo un tramo bastante pestoso, con obras y maquinaria por el monte.
Nos volvimos a encontrar en El Espino y desde allí seguimos hasta Tineo ya todos juntos.
Saliendo de Tineo nos paramos en plena subida a comernos los bollos preñaos que compramos en El Espino y nos echamos un rato a la sombra.
A partir de ahí mucha subida, dura y larga, aunque bonita.
Paramos en Porciles, donde nos dieron las indicaciones para dormir en Pola. Subimos dos puertos y hasta nos jugamos al sprint el último de ellos.
Llegamos a Pola de Allande sobre las 7 y enseguida encontramos el hotel. En pola no hay albergue y el siguiente es posible que esté lleno.
El hotel muy bien y cenamos en el mismo sitio.
Estamos todos demasiado cansados hasta para dar un paseo.