Etapa 3

Estella – Logroño (58 kms)

Esta noche también hemos dormido poquito. El albergue de Estella está bien, pero está muy masificado. También éramos más de 60 personas. A las 5 y media de la mañana empezaron a levantarse los peregrinos, y con el ruído de unos pocos se levantaron los demás, hasta que se vieron con la libertad de encender luces y ¡venga! todos en planta. ¿Dónde quedó eso de levantarse en silencio, recoger sin hacer ruído y salir descalzos para no molestar a los que quieren dormir un poco más?… lejos, muy lejos.

Así que a las 7 y media ya estábamos dando pedales, después de desayunar algo en el mismo albergue.

De ahí a tomar un trago de vino en la fuente de las Bodegas Irache. Más adelante, la foto de rigor en Azqueta, esta vez nos hemos sacado la misma foto los dos, primero Paco subió a pié hasta el final de la cuesta para sacarme a mí, y luego bajo a por la bici para sacarlo yo a él.

En Villamayor de Monjardín paramos a tomar un bocata para seguir hasta Viana para llegar a la hora de comer. Chuletón en la sidrería de los que quitan las penas y los 11 kilómetros restantes hasta Logroño mientras hacíamos la digestión. Eso sí, paramos en un parquecito a echar una microsiesta, que hacía demasiada calor otra vez. Llevamos tres días de calor veraniego, aunque nos salva la brisilla que corre y que evita que nos derritamos por momentos. Estamos bebiendo más agua que en verano.

Llegamos a Logroño a las 5 de la tarde, y en el albergue nos ponen pegas para quedarnos allí. Nos dicen que tenemos que esperar hasta las 7, por lo que nos vamos al otro albergue, uno privado, amplio, límpio y muy agradable. Buen cambio.

Después de tres días sin poder escribir en condiciones hoy tenemos wifi en el albergue… a ver cuándo podemos volver a escribir.