Etapa 8. San Pedro de Rozados – Zamora

Hoy toca un café bebido por la mañana, porque en el pueblo no hay nada abierto a las 7:30 y en la casa sólo hay café de máquina, así que salimos prontito. Vamos con idea de desayunar ya en Salamanca, aunque quedan 20 kilómetros, con desnivel favorable. Pero a medida que los kilómetros “no van pasando” y el reloj corre inexorable, decidimos parar antes de Salamanca. El siguiente pueblo es Miranda de Azán, y nos tenemos que desviar un poco. Pero a las 9:30 también es muy temprano en los pueblos, así que seguimos hasta Salamanca, esta vez sin remedio. A la entrada de la ciudad nos enteramos de que es festivo, y es que la entrada es una romería de gente andando, corriendo y practicando bicicleta. En el cerro que corona la última subida nos paramos a charlar con un grupo de cuatro ciclistas que están haciendo su rutita de fin de semana. Les pedimos consejo para desayunar y nos mandan a un mesón que hay cerca del camino, pero que nos tenemos que desviar un poco. Con buen criterio, hacemos caso a la recomendación y damos con un lugar fantástico, atendido de forma ideal y con unos pinchos exquisitos. Mesón Zurguen, para más señas. Gracias chicos por la recomendación. En Salamanca entramos al centro para recorrer sus calles y buscar la plaza Mayor, y como ya es habitual nos recibe la banda municipal y toda la comitiva, fuerzas vivas incluidas. Salimos por carretera de Salamanca hacia El Cubo de la Tierra del Vino, pero la memoria, que a veces juega malas pasadas y se deforma con el tiempo nos hace creer que durante todo el tramo desde Salamanca a El Cubo el camino va paralelo a la carretera, en el mismo arcén. Nada más lejos. En 2004 en esta carretera coincidimos con una grupeta ciclista en la que iba Agustín Tamames campeón de la Vuelta a España de 1975 y estuvimos rodando con ellos hasta El Cubo. Quizás por eso no guardamos recuerdo de la carretera, los cruces y los detalles. Llegamos a El Cubo con 50 kms y muchos por carretera, y nos replanteamos llegar a Zamora, eso sí, había que comer antes. Esta vez nos comportamos y tiramos de comida ligera, al menos más ligera que otros días. También es verdad que no había mucho más donde elegir. Volvemos a tomar camino con dirección a Zamora, nos queda una pequeña subida y el reto bajada hasta Zamora. Llegamos sobre las 19:00 a Zamora, y viendo que el albergue está lleno, aunque hubiésemos podido dormir allí, preferimos hoy tirar de hostal y así no tener que irnos demasiado pronto a dormir y poder tomarnos las cosas con más calma. A pesar de lo suave y fácil del terreno hoy nos hemos hecho 100 kilómetros también… hay que quemar lo que comemos.